CIUDADANÍA DIGITAL
En la búsqueda de una nueva ciudadanía digital, la cual ha sido ciertamente precipitada por los acontecimientos a escala global de este último tiempo, nos encontramos frente a enormes desafíos como emergente sociedad en la red. Los últimos hechos que enfrentan el mundo de las redes sociales dan cuenta de ello, asociados a la problemática generada por la rápida viralización de contenidos, por su veracidad y la posibilidad existente en estos momentos de difundir información desde el anonimato sin que exista una responsabilidad sobre el contenido de la información publicada.
Para poder avanzar hacia una verdadera ciudadanía digital es necesario desarrollar un cuerpo normativo que permita regular las relaciones entre ciudadanos digitales equivalente al ya existente en nuestro mundo analógico, y dado que la información constituye el elemento base de esta nueva plataforma digital, uno de los principios fundamentales que se deberá consagrar guarda relación con el inherente derecho a la libertad de expresión el cual sólo puede ser ejercido por una persona o sujeto de derecho identificable y no desde una condición de anonimato como en la actualidad ocurre en las redes sociales, debido a esto, en estos momentos el generar un sistema de verificación de identidad digital que reúna las características de seguridad y transparencia se ha convertido en un elemento esencial para la consecución de una verdadera ciudadanía digital.
Paradójicamente, en esto momentos tenemos desde el mundo de la criptografía un avance que puede venir a apoyar fuertemente el desarrollo de un sistema de identificación digital, nos referimos a la tecnología blockchain desarrollada en primera instancia para las criptomonedas, pero con múltiples posibilidades de aplicación. Básicamente lo que permite la tecnología blockchain o cadena de bloques, es la generación segura de una base de datos tanto de una información existente como también de todo su historial, en una estructura transparente y descentralizada, donde cada uno de los nodos de la red almacenan el registro de la información, de forma tal que no es necesaria la concurrencia de una entidad centralizada de control que valide los datos, y donde toda la información se distribuye homogéneamente en forma descentralizada.